Cientos y cientos llegan a la Batalla de la Fe, en el Centro Olímpico
SANTO DOMINGO.- Con cornetas, güiras y tamboras, cientos de ciudadanos llegan desde tempranas horas de la tarde el Centro Olímpico para darse cita en la concentración evangélica «Batalla de la Fe» que se realiza cada 1 de enero desde hace 58 años.
Para el ingreso se están siguiendo los protocolos sanitarios, como distanciamiento, toma de temperatura e, incluso, aplicación de pruebas rápidas anticovid.
Sobre este particular, un equipo de Salud Pública se trasladó al lugar para realizar 800 pruebas rápidas aleatorias, donde hasta las 3:00 de la tarde ya se habían aplicado unas 300, de las cuales varios han dado positivos.
«Cuando sale alguien positivo, los apartamos y lo retiramos del evento», dijo Ruíz.
El responsable del equipo, Isaías Ruíz, dijo que con la medida buscan dar cumplimiento a las resoluciones 0048 y la 0069, del Ministerio de Salud Pública.
Al lugar no se está permitiendo la entrada de personas que no tengan al menos dos dosis de la vacuna contra el Covid.
Desde afuera, entre largas filas con niños y adultos de todas las edades, se escuchan los gritos de júbilo y proclamaciones de los asistentes que acudieron al evento en el que se espera la presencia de alrededor de 30 mil personas”.
Las puertas del Estadio están abiertas desde las 11:00 de la mañana y el evento está pautado a iniciar a las 3:00 de la tarde. Desde ya, la algarabía colma las gradas del lugar a la espera de que empiece el encuentro para alabar al Señor ante la llegada de un nuevo año.
Advertencia
Independientemente de las recomendaciones del ministerio de Salud Pública para evitar la mayor difusión de la variante ómicron del Covid-19 en el país, los presentes se observan con y sin mascarillas vociferando desde las partes más altas de lugar.
El ministro de Salud, Daniel Rivera, dijo el pasado jueves que recibió la presentación de la propuesta por parte de los organizadores, un mes antes, cuando las cifras de casos “se mantenían estables” pero ante el nuevo panorama tuvo una opinión más conservadora.
“Junto a otros doctores le recomendamos a los anfitriones que reduzcan la cantidad de personas que pondrán acudir al evento, de manera que solo sea el 50 por ciento como lo dicta la resolución”, expresó el ministro.