EFE – NUEVA YORK.- El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este viernes con una subida del 5.7 %, hasta los 39.55 dólares el barril, en una jornada marcada por los avances en las negociaciones de la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus socios (OPEP+) para la extensión de los ajustes de producción vigentes y por los positivos datos de empleo que registró Estados Unidos el último mes.
Al final de las operaciones en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex) los contratos de futuros del WTI para entrega en julio sumaron 2.14 dólares respecto a la sesión previa del jueves, cuando el Texas avanzó un 0.32 %.
Los precios del petróleo de referencia en Estados Unidos subieron en medio de las negociaciones de la OPEP+ y la posibilidad de continuar con el histórico recorte de 9.7 millones de barriles entre uno y tres meses.
En los últimos días, las posturas entre Rusia y Arabia Saudí, que en marzo protagonizaron una guerra de precios sin precedentes tras romper negociaciones en una reunión similar a la que está pendiente, se han acercado.
Ambas potencias cuestionan los niveles de ajuste de otras naciones productoras, a las que piden que compensen el incumplimiento de los últimos meses con más recortes para poder equilibrar finalmente el mercado.
«Parece ser que anoche se logró un gran avance con Irak y por eso los precios del crudo reanudaron las ganancias, tanto para el Brent como para el WTI. Iraq ha sufrido para cumplir plenamente con su recorte objetivo de 1.06 millones de barriles por día, llevando a cabo solo alrededor de un recorte de 400,000 bpd para el primer mes de mayo de 2020», apuntó en una nota el analista de Rystad Energy Bjornar Tonhaugen.
Asimismo, el crudo estadounidense subió apoyado por las últimas estadísticas del departamento de Trabajo del gobierno federal, que muestran la creación de 2.5 millones de empleos en mayo y una disminución en la tasa de parados, que bajó hasta el 13.3 % tras alcanzar el 14.7% en abril.
Estos datos inspiran confianza entre los inversores, que esperan que suponga el comienzo de una recuperación económica en forma de «V» y, por tanto, un repunte en una demanda que no termina de despegar y que debería ayudar a equilibrar el exceso de oferta que impera en los mercados desde que se desató la pandemia de COVID-19.
También ayudaba al alza de los precios la aparición de la primera tormenta tropical de la temporada en el Golfo de México, un área nutrida de numerosas plataformas petrolíferas cuyos cierres por el temporal provocarán una disminución en la producción.
En este contexto, los contratos de futuros de gasolina con vencimiento en julio sumaron casi siete centavos hasta los 1.21 dólares el galón, y los de gas natural, que expiran en julio, restaron cuatro centavos hasta los 1.78 dólares por cada mil pies cúbicos.