“Con el comportamiento de ese individuo, la comunidad tiene miedo que se produzca una tragedia, como ha pasado en los sectores de Los Guandules, Villa Mella y Los Tres Brazos, porque la familia lo escondió, pero el azote volvió a hacer de las suyas y prevalece el temor, debido a que no deja dormir a nadie en paz con el bullicio de la música alta en las madrugadas”.
SANTO DOMINGO ESTE, R. D.— Moradores de la Calle 11, en Los Mina, denunciaron que resurgió un azote que tiene en zozobra ese sector, tras sentirse atemorizados y bajo terror, por la actitud asumida por un tal Dawing, quien se ha dado a la tarea de alterar el orden y la paz en esa zona.
Dijeron que ese sujeto ha tenido reiterados conflictos con algunos vecinos, porque le han llamado la atención por la bulla que hace con una bocina a alto volumen desde la azotea y/o la acera de su residencia a altas horas de la noche, acompañado de algunos “amigos”.
Según informaron los quejosos de esa calle (ubicados en el tramo que está entre la avenida Fernández de Navarrete y calle J1), quienes se negaron a dar sus nombres por temor a represalias, el nombrado Dawing, que vive en la casa número 6, ha perturbado el orden en las últimas semanas, por el bullicio que mantiene en la zona.
Junta de vecinos
Indicaron que la Junta de Vecinos del sector se reunió para tratar el caso de la música alta, pero la situación se agravó por los disparos al aire que hizo el individuo tras chocar con algunos residentes, quien recibió el apoyo irresponsable de su familia, que lo sacaron del lugar, pero luego de un tiempo volvió nuevamente con sus impertinencias.
Temen tragedia
Los vecinos temen que se produzca una tragedia, como sucedió en otros barrios, debido a que, cuando se produjo el último incidente que el individuo sacó una pistola y lanzó tiros al aire, la Policía Nacional acudió al lugar y duró un tiempo en su casa, pero al parecer no pasó nada, porque el tal Dawing quedó suelto.
Cuestionaron el por qué, y que no se justifica, ese señor que acabó de salir de la cárcel recientemente -duró más de un año preso- tenga en su poder un arma de fuego y la comunidad no sabe qué hizo la Policía para prevenir que en cualquier momento se produzca una tragedia.
Alegaron temer por la vida de los ciudadanos, ya que ese señor se ha convertido en un peligro público al disparar al aire sin saber a quién se le puede pegar un tiro y al volver a subir la música tarde de la noche, provoca a los vecinos al no dejarlos dormir en paz, pero lo más grave es que su familia lo encubre y lo apoya.
Llamado a la Policía Nacional
Los moradores del sector hacen un llamado a la Policía Nacional, para que tomen las medidas de lugar para poner freno a los desmanes del revoltoso y así evitar una posible tragedia, pero piden además no hacerlo después que ocurra un hecho lamentable, por lo que sugieren que se haga una investigación primero, para que confirmen los hechos.